Los amigos de Jesús estaban tristes, Jesús murió en la cruz. Lo sepultaron en una tumba, y pusieron una piedra grande en la entrada. Los amigos de Jesús pensaban que nunca mas lo verían.
Dos días después, muy de mañana, cuando a penas estaba saliendo el sol, María y una amiga fueron al jardín para ver donde estaba enterrado Jesús. Tal vez iban llorando.
De pronto hubo una gran sorpresa para Maria y su amiga. ¿Puedes adivinar cual fue esa sorpresa? (
De lugar a respuestas.) La tierra comenzó a temblar. Un ángel bajo del cielo. ¿Han visto relámpagos alguna vez? El ángel se veía como un relámpago. Su ropa era blanca como la nieve, el ángel tomó la gran piedra que había en la entrada a la tumba de Jesús. Empuja, empuja. El ángel empujó la piedra.
(Que los niños simulen empujar una piedra grande.) El ángel movió la piedra hasta abrir la tumba. Luego el ángel se sentó en la piedra. -No tengan miedo —dijo el ángel— Jesús vive. ¡Miren! La tumba está vacía. Vayan a contar a los amigos de Jesús que el está vivo. (
Que los niños digan: ¡Jesús vive!
Luego sucedió algo maravilloso. ¡Maria y su amiga vieron a Jesús! ¡Jesús vivía! Las mujeres se arrodillaron a los pies de el y lo adoraron.
—vayan a decir a mis amigos que pronto me verán— les dijo Jesús.
(Que los niños griten: JESÚS VIVE!
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